IMPORTANCIA DE LAS COFRADÍAS EN LA IGLESIA

Hay un aspecto fundamental en  la vida de las cofradías : la colaboración con el resto de la Iglesia. Antiguamente, las cofradías destacaban por sus  obras de caridad con los enfermos, por su colaboración en la atención a los moribundos y en los entierros de los hermanos cofrades,  en atención a peregrinos, ayuda y defensa de viudas y apoyo a huérfanos. Hoy la mayor parte de estas tareas las realiza las instituciones públicas,  de modo que muchas de ellas han dejado de ser tareas de las cofradía. Pero siguen teniendo una misión, una razón de ser.:

  1. Cooperación generosa con la Iglesia y  la sociedad.
  2. Aportación de la vida, sentido y acción nacidas del Evangelio.
  3. Crítica de aquellas situaciones que , a la luz de la fe,  nos parecen injustas e  inhumanas..

Nos debemos preguntar en cada momento, como cofradías,   cuál debe ser nuestra aportación cristiana a la vida, a la sociedad, a la Iglesia: La vida cristiana  abarca a todas las dimensiones de la existencia: las temporales y las eternas, las individuales y las colectivas, desde lo que Dios ha dicho y ha querido para ellas.

Cuando alguien oye la palabra de Cristo y la obedece, siente la necesidad de purificar su corazón, encuentra luz y fortaleza para la voluntad. Es lo que debemos buscar en una cofradía, y no otras cosas que se pueden lograr por otros caminos.

La cofradía, en nuestro caso de Villanueva de Gómez, tiene un aspecto integrador; toda la familia del cofrade se siente implicada (el padre, la madre , los  hijos, los hermanos… y hasta los mismos vecinos)  y los ayuda a todos a crecer juntos en la Iglesia. Lo mismo que nunca una ermita sustituye a la parroquia del lugar, a la comunidad entera de la parroquia, tampoco una cofradía puede sustituir a una comunidad parroquial. Las cofradías encajan en las parroquias,  no pueden ser islas ( sucede muchas veces…),  son asociaciones de fieles católicos, y no simplemente de ciudadanos ( esto lo sería una asociación cultural, deportiva, gastronómica…)). Su regulación interna viene dada, por tanto, por la propia ley de la Iglesia. El Código de Derecho Canónico  regula las cofradías, asociaciones privadas y públicas de fieles.

Por eso una cofradía, un hermano cofrade, debe preguntarse si la razón de ser cofrade, de pertenecer a una cofradía es sólo por «herencia» familiar»,  si es un grupo abierto a los demás, un grupo creyente  o vive al margen de la  parroquia y de la Iglesia diocesana., como sucede a veces en muchas cofradías. Sus miembros viven la fe  solo en sus fiestas, pero no hacen un camino de formación, de  piedad y testimonio durante todo el año.

Es necesario  alimentar nuestra fe, mediante la oración, la formación cristiana y los sacramentos. Nuestras fiestas y  procesiones tienen que ser una explícita confesión de fe y de agradecimiento al Señor y a la Virgen de los Dolores.

Es importante fortalecer  la fidelidad de nuestra cofradía a la fe que hemos recibido de Dios y de nuestros antepasados, que es fidelidad al Señor, a su Evangelio y a la Iglesia de la que esta cofradía forma parte. Que la Virgen de los Dolores  nos ayude a lograr estos preciosos fines de  la cofradía.

Descargar en formato PDF